Los sacerdotes pasan, en la Comunidad de Madrid, de asistir al paciente cuando este lo pide a tener opinión en el comité ético que aconseja a los médicos en casos con problemas éticos, cuidados paliativos, enfermos terminales, etc.
¿Quién decide si se practica un aborto a una mujer embarazada con un feto que sufre malformaciones? ¿Será peligroso para la salud de la madre? Para tomar estas decisiones está el médico responsable. Pero para orientar la decisión, todos los hospitales cuentan con un comité ético del que forman parte profesores de ética, de Derechos, ATS, asistentes sociales, médicos... y sacerdotes. El Gobierno de la Comunidad de Madrid que preside Esperanza Aguirre firmó el pasado mes de enero, según ha revelado la cadena SER, un convenio con la Provincia Eclesiástica de Madrid en el que se deja abierta la puerta a la entrada de "capellanes" a los comités de ética de los hospitales públicos madrileños.
En concreto, este acuerdo, traducido en una cláusula del convenio en vigor desde 1997 y que ahora ha renovado el consejero de Sanidad, Juan José Güemes, amplía las funciones de los curas que asisten a los hospitales. La cláusula dice que "el Servicio de Asistencia Religiosa Católica (...) formará parte del Comité de Ética y del Equipo Interdisciplinar de cuidados paliativos". Este convenio y el contenido de su cláusula tercera ha provocado el revuelo en el Gobierno regional. Güemes, uno de los firmantes del último convenio, ha limitado, a pesar del texto del acuerdo, la acción de los sacerdotes a "asistir a pacientes o familiares de pacientes".
En la práctica, según fuentes hospitalarias consultadas por este periódico, los sacerdotes sí participan en estos comités, aunque no sólo como religiosos sino como expertos o especializados en temas de bioética. Hasta estos comités llegan aquellos asuntos delicados y ante los que un médico puede tener dudas éticas. Sin embargo, este comité sólo asesora al médico responsable y, por tanto, no tiene carácter vinculante sino consultivo. El médico puede tomar una decisión contraria.
La revelación del contenido de esta cláusula en el convenio entre el Gobierno madrileño y el cardenal arzobispo, Antonio María Rouco Varela, ha suscitado la denuncia desde las filas del PSOE e Izquierda Unida que han pedido la comparecencia de Esperanza Aguirre. El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, presidente regional en 1997, año en el que se formalizó el convenio por primera vez, ha afirmado desconocer el contenido del convenio.
La "Asistencia Religiosa Católica" en centros hospitalarios públicos fue acordada entre los Ministerios de Justicia y de Sanidad y Consumo y la Conferencia Episcopal en 1985. A partir de este acuerdo, las Comunidades Autónomas desarrollan el cumplimiento del acuerdo, en el caso de Madrid, con los convenio de 1997, que lleva esta asistencia a los centros dependientes de la Comunidad Autónoma, y del 17 de octubre de 2001, por el que se asume también la de centros del Estado.